Denuncia cronológica de la situación política en los distritos mineros: Catavi, Siglo XX, Uncia y Miraflores.

NR/ Este importante documento, se dio a conocer a pocos días del 17 de julio de 1980. Llegó a nuestro portal en estos días, que se recuerdan los 41 años de aquella luctuosa fecha de la historia boliviana: el golpe militar de Luis Arce Gómez. Uno de estos firmantes, el compañero dirigente minero Tomás Quiróz, tras mantenerse en la clandestinidad algunos meses salio exiliado a Suecia. Residió en la ciudad de Malmö, hasta la reapertura democrática en el país: octubre de 1982.



INTRODUCCIÓN/strong>Como dirigentes mineros del Sindicato Mixto de Trabajadores Mineros de Catavi, vemos de nuestra exclusiva y principal responsabilidad denunciar antes los organismos internacionales los hechos ocurridos en los campamentos mineros, cuando se resistió al golpe fascista instaurado el 17 de julio por la nueva rosca y los narcotraficantes.

Jueves 17 de julio

Aproximadamente a media mañana los trabajadores de los campamentos mineros nos enteramos del levantamiento militar, encabezado según las informaciones por el Gral. Luis García Meza. Inmediatamente los dirigentes reunidos en el Comité Ejecutivo Sindical, con la participación de los partidos políticos nos reunimos para analizarla situación que amenazaba nuevamente el normal curso del proceso democrático. La reunión que después se convirtió en Comité Regional de Defensa de la Democracia resolvió por unanimidad decretar HUELGA GENERAL INDEFINIDA, la cual fue confirmada pocas horas después por el Comité Ejecutivo de la COB que ampliaba la medida con el BLOQUEO GENERAL DE CAMINOS. Hasta ese momento las informaciones recibidas desde la ciudad de La Paz eran mas o menos normales, por lo que nos informamos minutos más tarde del asalto armado de paramilitares a la sede de la COB, donde se produjeron las primeras bajas. Mueren en ese asalto los compañeros Gualberto Vega Yapura, ejecutivo de la FSTMB, de la Federación de Mineros y oriundo representante del distrito de Catavi; la de Marcelo Quiroga Santa Cruz, jefe del Partido Socialista 1 y miembro del CONADE, cayeron heridos al mismo tiempo miembros del CONADE. Conocida esta noticia, el Comité Ejecutivo de a FSTMB, Artemio Camargo, Gilberto Bernal y C. Martínez, quienes se destacaron al distrito de Catavi. Esta reunión contó con la participación de los delegados de base de los cinco sindicatos que agrupa el Comité Ejecutivo, esta reunión resolvió lo siguiente: “Acatar disciplinadamente todas las determinaciones de la COB y CONADE. Así mismo se acordó la Resistencia Civil al Golpe Militar”.

Viernes 18 de julio

Ante la gravedad de la situación política se determina reunión permanente para el Comité Ejecutivo y delegados de base mas los miembros de CONADE. Se resuelve efectivizar la resistencia y se comienzan a construir barricadas en la calle, en cada casa. Se forman piquetes de seguridad y resguardo de nuestras radioemisoras sindicales y religiosas, participan en esta tarea: los trabajadores, las amas de casa, los jóvenes estudiantes, los campesinos se van uniendo al movimiento obrero en la resistencia. Es durante este día que las fuerzas represivas toman violentamente la población civil de Uncía, apresan al alcalde Municipal Hugo Serrano y a los dirigentes principales del comité Amas de Casa de Miraflores y se parapetan en cada casa, en una esquina en clara actitud de enfrentar y provocar una guerra descomunal armamento y violencia.

Sábado 19 de julio

Sobrevuelan aviones jet de la FAB nuestros campamentos mineros de Catavi, Siglo XX y la población civil de Llallagua en claro intento de amedrentamiento a la población. Como reacción las amas de casa en algunos hogares inician excavaciones de sótanos para el resguardo de los niños principalmente. Aún este día se mantenía la gran cadena Radial de Emisoras mineras de: Catavi, Siglo XX, Colquiri, Central SUD, Viloco, Huanuni, y fue al finaliar este día que aviones de guerra bombardean las instalaciones de Radio Colquiri, siendo la primera radio acallada por el fascismo.

Domingo 20 de julio

El propósito de loa militares era acallar todas las emisoras mineras. Ya lo habían conseguido con Radio Vanguardía de Colquiri. Ese día nos reunimos en gran asamblea general y determinamos “redoblar la vigilancia y la defensa, levantamos más barricadas en cada boca-calle y el embanderamiento a media asta con crespón negro en todos los campamentos mineros, utilizar en cada barricada pancartas que digan “SOLDADO NO MATES S TU PUEBLO”.

Absolutamente todo el pueblo responde a las tareas de la resistencia. Impresionantes destacamentos de campesinos, amas de casa, ancianos, niños, cumplen las tareas con firme voluntad de lucha hasta entregar sus vidas por un mañana mejor. En cada barricada se hace guardia para la vigilancia de esta manera la entrada de paramilitares disfrazados (evitando). Se intensifica la llegada de llegada de compañeros campesinos que rodean los campamentos mineros en actitud solidaria y combatiente, con alrededor de diez mil campesinos que marchan sobre las minas para integrarse a la resistencia.

Los militares por su parte, piden refuerzos al comando general de Oruro, de donde envían aviones, helicópteros y tropas fuertemente armados. Ese mismo día se conoce la llegada de un avión en que venían asesores argentinos tanto militares como paramilitares.

García Meza personalmente instruye la toma de los campamentos mineros y la destrucción de sus radios emisoras a costa de cualquier precio. Esta orden se pone en práctica, iniciando la ofensiva por el sector de Miraflores. Dos trabajadores son asesinados en sus puestos de guardia por rifles de largo alcance y provistos de miras telescópicas. Minutos después será acribillado a balazos de metralla la ambulancia en que se intentaba recoger los caídos, en esta acción penada por toda norma cae acribillado un miembro de la Cruz Roja Boliviana.

Más tarde miembros de la FSTMB informa que otra emisora cayó en manos de la represión. Ese día a las cuatro de la mañana, paramilitares fuertemente armados utilizan una ambulancia para ingresar al distrito de Huanuni y tomar la emisora Nacional destruyendo totalmente sus instalaciones, demostrando un desprecio total por la vida humana y haciendo gala de armamento moderno y automático; empezaron a disparar contra todo aquel que se ponía al frente, matando a trabajadores, amas de casa y niños de corta edad, asimismo, destruyendo totalmente Radio Nacional de Huanuni, allanan los domicilios de los dirigente. Todo dirigido por el coordinador Chambi y paramilitares argentinos.

Lunes 21 de julio

Se conoce informes desde el Consejo Central Sud sobre la toma de la radio de Siete Suyos utilizando ambulancias, desde el cual se ametrallaba a trabajadores, mientras los paramilitares destruían la radio. Ese día se tuvo que lamentar muchos heridos y numerosos presos.

Desde ese día jueves 17 de julio hasta este día los mineros vivimos en un ambiente de tensión permanente durante el día y la noche y ya cundiendo el cansancio tanto en trabajadores, amas de casa, estudiantes y campesinos.

Los militares se apoderaron de dos partidas de carne (por avión) destinados a los campamentos, dejando desabastecidas las pulperías. A la vez las pulperías cierran sus puertas por falta de provisiones, sin embargo, las amas de casa hacen esfuerzos para alimentar a esposos, hijos y a los 10.000 campesinos que permanecen haciendo guardia.

Martes 22 de julio

Ante la situación tensa que se vivía y ante l toma y destrucción de otras radios mineras, los trabajadores del distrito ven la necesidad de reunirse a través de sus delegados y sus dirigentes para analizar la situación y la insistencia por parte de los campesinos de tomar el cuartel.

Los trabajadores pudieron persuadir a los campesinos de no permitir el derramamiento de sangre entre bolivianos en vista de la presencia de elementos argentinos que obligaban a disparar a los soldados contra sus hermanos. Asimismo, se llamó a la serenidad a la población ante cualquier eventualidad armada. Sin embargo, los ataques de los militares persistieron en Miraflores, rodeando de esa manera todo el campamento, ocasionando heridos, especialmente mujeres que resguardaban la pulpería.

Padres de familia empezaron a poner a sus hijos a buen recaudo, frente a reiteradas amenazas de una intervención militar, evitándose de esta manera una posible masacre.

En horas de la noche, después de la conclusión de la reunión de dirigentes y delegados se informó del ametrallamiento a la camioneta sindical por elementos paramilitares que estaban apostados en el puesto militar dentro del campamento de Catavi. Ante esta situación decidimos expulsarlos de ese puesto militar pacíficamente. Sin embargo, se resistieron a abandonarlos. Después de dos horas de batallar se escaparon al cuartel de Uncia dejando un soldado muerto y un herido. Por otra parte, se tiene que también lamentar la muerte de un trabajador y varios heridos ocasionados por la metrallas y granadas de los militares. Posteriormente se intervino al puesto en el que se encontró alimentos enlatados de procedencia argentina.

En horas de la madrugada sobrevolaron aviones de guerra sobre los campamentos, amenazando bombardearlos.

Miércoles 23 de julio

Ante la reacción sistemática del comandante del cuartel de Uncía de tomar los campamentos a través de una masacre en masa sino se aceptaba los puntos planteados a los trabajadores, cual era el devolver el armamento y todos los bienes militares que se había tomado pacíficamente la noche anterior, se decidió poner en conocimiento y en consideración este pretexto de los militares para tomar los campamentos a los trabajadores de Siglo XX y Catavi, los mismo que no fueron aceptados y rechazando enfáticamente el plazo impuesto que se nos dio de cinco horas. Ante esta situación el C. Camargo decidió informar a las bases las amenazas de que fuimos objeto, aclarando las implicaciones y los peligros que la misma tenía. Pese al reiterado rechazo de las condiciones militares ante los trabajadores, el campamento de Catavi quedaba paulatinamente vacío por cuanto sus pobladores en impresionantes caravanas abandonaban los campamentos para buscar seguridad junto a sus dirigentes sindicales de Catavi.

ANEXO

Incluimos en el presente documento los puntos que fueron propuestos por los militares para levantarla huela de los trabajadores del subsuelo.

1.- Entrega de todas las radios emisoras sindicales, religiosas y comunales, según un inventario minucioso a las FF. AA.

2.- Devolución de todo el armamento en posesión de los trabajadores mineros, además de los incautados en Catavi, durante la toma del puesto militar en ese campamento.

3.- Allanamiento general de todas las viviendas en todos los campamentos mineros para requisar las armas mencionadas.

4.- Levantar la huelga general indefinida según las declaraciones de Juan Lechín Oquendo, máximo Ejecutivo de la COB.

Garantías para dirigentes y trabajadores tanto en sus labores como en cuestión personal.

Este planteamiento no se aceptó ni se rechazó, proponiendo como alternativa y seguridad: “La participación de la Iglesia en la firma por lo que se hizo llamar al Cardenal Maurer con residencia en Sucre.

SINDICATO MIXTO DE TRABAJADORES MINEROS DE CATAVI

Tomás Quiroz Ricardo Fernández

Secretario General Secretario Relaciones